Pensar despacio, ejecutar rápido
Una start-up es un organismo recién nacido: poco personal, recursos limitados, experiencia escasa. En un entorno feroz, cualquier descuido la derriba antes del amanecer. El fundador, alma de la compañía, carga con una responsabilidad enorme y debe permanecer en posición de combate. Estas prácticas son clave:
Practica un pensamiento estratégico extremo. En la etapa inicial, cada hora y cada recurso cuentan. Muchos fundadores creen que tomar decisiones rápido es sinónimo de determinación y terminan saltando a conclusiones erróneas. Cada fallo consume las pocas reservas. Usa tu criterio y tu imaginación para llevar la reflexión estratégica al máximo, siempre anclada en la misión y la visión, evitando sacrificios sin sentido.
Repite tu filosofía. Aunque el fundador conozca la misión de memoria, cofundadores, equipos clave y empleados no siempre la interiorizan ni conectan su trabajo con ella. Muchos se limitan a cumplir lo que se les asigna. Solo cuando todos comparten la misión surge la resonancia organizacional. Repite la misión, la visión y cada cambio organizativo o de rumbo hasta que todos lo asimilen y lo ejecuten.
Mantén la conciencia de crisis—evita el efecto rana hervida. Algunas empresas, al crecer, se relajan. Pero el mundo es una lucha por recursos; los competidores acechan. Si aflojas, tu producto queda superado; si aflojas, la tecnología se rezaga; si aflojas, te quitan clientes. Emprender es remar contracorriente: dejas de remar, retrocedes.
Concentra el fuego en una sola brecha. Con recursos limitados, enfócate en el negocio principal. No golpees a diestra y siniestra. Construye primero flujo de caja estable y un foso defensivo; después corrige los puntos débiles alrededor.
Aprovecha el momento y actúa rápido. Cuando el producto cubra las necesidades básicas del cliente, sácalo y deja que el mercado lo valide para seguir iterando. Incluso Steve Jobs perfeccionó el iPhone versión tras versión. Las empresas de internet veneran la velocidad—Facebook predicaba “Move fast, break things”. En la China hipercompetitiva, la velocidad es la única arma de una start-up.
Publicado el: 15 de ago de 2019 · Modificado el: 4 de dic de 2025
